El próximo jueves 10 de abril se inaugurara en el Centro de Historias de Zaragoza la exposición "Historias para no olvidar, Chicho Ibáñez Serrador. Retrospectiva de un genio".
En palabras de su comisario, Carlos Urrutia: "Los autores, los creadores, son aquellos que parecen construir una realidad, intensa y humana, más allá de la nuestra, más allá de las simples imágenes y las simples palabras. Pero crear no es idear desde la nada, sin generar vida, sin recrear permanentemente. De la recreación, cuando la acompaña la genialidad, surge la novedad, el talento, la influencia. Y buscando ejemplos de todo esto, encontramos pocas figuras que puedan parangonarse con la de Narciso “Chicho” Ibáñez Serrador".
Nacido en Uruguay de padres actores, el que parecía destinado a ser una figura más de la escena se afincó en España y llegó mucho más lejos. Todos aquellos ámbitos en los que colaboró, se transformaron a su paso. Fue dramaturgo esporádico en los escenarios, pero siempre destacado (Aprobado en inocencia, El águila y la niebla...), aunque en realidad no dejó de escribir ni un solo día ni una sola noche: para televisión, para cine, para revistas. Leyó más que nadie, realizó más que nadie, y siempre transmitía la sensación de que aún quedaba mucho más por hacer, de que tenía todavía mucho más que aportarnos.
Trajo la fantasía más elevada (Poe, Bradbury,Twilight Zone) a la televisión con sus Historias para no dormir, impulsando de paso a toda una generación de jóvenes escritores de género en nuestro país (Buiza, Garci, Tébar, Plans) que encontraron en él el apoyo para darse a conocer.
Indagó en el terror en la gran pantalla, y de manera ecléctica nos aportó algunas de las obras maestras del cine en español, como La residencia y ¿Quién puede matar a un niño? Supo mostrarnos que la pequeña pantalla era el lugar ideal para la experimentación y la diversión, cogidas de la mano, y para la formación del mismo espectador.
Programas pioneros como Waku-Waku o Hablemos de sexo se concibieron para divertir e informar a pequeños y adultos; El semáforo exploró con humor las posibilidades del show en vivo de nuevos talentos. Un, Dos, Tres fue la ópera omnia en la que todo podía caber y cabía (concurso, comedia, musical, interacción), una cita ineludible para toda España, que veía en aquel mítico programa depositados el suspense, la diversión y la esperanza.
La exposición es un recorrido por la vida personal y profesional de Narciso Ibáñez Serrador. Comenzaremos por su partida de nacimiento en Montevideo (Uruguay), pasando por fotos de su Primera Comunión, cuadernos de la escuela, cartas personales dirigidas a su padre Narciso Ibáñez Menta…. Todo este material original nos marcará el camino para comprender cómo ese niño se convirtió en genio.
Recorreremos sus inicios en el teatro de la mano de su madre, Pepita Serrador, su primer texto original Obsesión, recientemente encontrado y restaurado (se creía desaparecido) y fotografías inéditas de su adolescencia, así como su primer carnet de actor profesional.
El material fotográfico inédito tiene un papel fundamental en la exposición. Vitrinas con fotos nunca vistas de su primera película La Residencia”(1969), programas de mano de la misma, así como figurines creados por Vitín Cortezo, uno de los mejores figurinistas de la historia del cine y del teatro español.¿Quién puede matar a un niño?, la segunda película de Chicho en 1976 también tiene un lugar de honor con su guión original, que curiosamente no tiene el mismo título que la película.
Por supuesto, hablar de Narciso Ibáñez Serrador es hablar del concurso más importante de la historia de TVE. El Un, Dos, Tres…responda otra vez está unido no solo a la trayectoria de Chicho. Varias generaciones esperábamos ansiosos delante de la televisión para descubrir nuevos mundos, divertirnos con los humoristas, ver actuaciones musicales nunca vistas y sobre todo gritar cuando los concursantes se llevaban el coche, el apartamento o… ¡100.000 pinzas de madera!
En la exposición “Historias para no olvidar” podremos descubrir todo el merchandising o el vestuario original de varios programas de este emblemático concurso a lo largo de su historia, empezando en 1972 y terminando en su última etapa en 2004. Un sorprendente y nostálgico recorrido por sus 10 etapas, 411 programas que nos acompañaron a lo largo de nuestra vida.
Todo este viaje lo podemos realizar con la exposición “Historias para no olvidar”. Una travesía no solo por la vida de Narciso Ibáñez Serrador, sino también por nuestros recuerdos.
Y en Zaragoza Fear no queríamos dejar pasar esta oportunidad, coincidiendo con el 90 aniversario del nacimiento de Chicho, y en colaboración con Filmoteca de Zaragoza, programaremos sus dos películas y una sorpresa muy especial que anunciaremos en su momento.
Pero eso no es todo porque además habrá varias actividades complementarias de las que iremos anunciando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario